EL PATIO ESCOLAR COMO ESPACIO EDUCATIVO

El patio escolar es el único lugar del centro educativo que está destinado exclusivamente al juego libre del alumnado, en el cual los pequeños exploran sus límites, experimentan, imaginan…en definitiva APRENDEN. Sin embargo, en la gran mayoría de los casos éstos tienen un diseño pobre y escasos de equipamientos.
Si le preguntamos a un niño qué cambiaría de su patio ¿qué creen que diría? Seguramente querría más espacios verdes llenos de hojas y tierra, un arenero., un lugar dónde escalar…. Y seguramente esto les haga más felices que los tradicionales columpios que habitan dichos patios.
Todos sabemos que una transformación íntegra de nuestro patio escolar es casi imposible en los tiempos que corre, pues siempre hay algo más “importante” en lo que invertir el dinero. No obstante, los docentes podemos tomar otras medidas para que el patio escolar sea un lugar óptimo de aprendizaje y de convivencia.
Como bien expone Rosa Jové en su libro “la escuela más feliz” en los patios escolares actuales presentan varios problemas:
1.    La separación entre edades: En la mayoría de los centros los niños de Educación Infantil y Educación Primaria no salen al recreo al mismo tiempo y si lo hacen salen a espacios diferentes.
¿Por qué separar a los niños si el aprendizaje es más rico cuando interaccionan varias edades? Con una intervención adecuada de los docentes, es decir, que en la hora del patio estén resolviendo conflictos, haciendo de mediadores… y no en corrillo hablando o tomando café; la mezcla de edades no sería un problema y no tendría por qué causar problemas.
2.    La gran diferencia de espacios: Hay estudios que demuestran que un 70-80% del patio escolar está ocupado por niños jugando a deportes (generalmente el football) que necesitan mucho espacio. Esto hace que las niñas se queden jugando en la periferia. ¿Qué hacen ante esta situación? Si se puede (porque el espacio lo permite) dar un espacio equitativo a todos, uno para jugar a los deportes y otro para aquellos que no lo practican. Si no es posible, se pueden fijar unos días a la semana para jugar a algún deporte y otros no… así todos tendrán oportunidad de juego.
3.    Poca presencia de profesorado en el patio escolar: La gran mayoría de los conflictos se producen en el recreo, ya que los pequeños juegan libremente con normas fijadas por ellos (que no suelen coincidir entre sí). Muchas situaciones de acoso escolar comienzan en el recreo, por ello es imprescindible que la vigilancia en este espacio sea abundante.
Si se aumenta el número de profesores en el patio se podrán gestionar de una forma positiva los conflictos. De este modo los alumnos aprenderán a manejan situaciones de estrés, sus emociones… y sobre todo a comunicarse de una forma más asertiva. Además, si hay mas docentes en el patio escolar, será más fácil detectar y prevenir situaciones de acoso escolar.

Como se puede ver estas sugerencias no tienen nada que ver con la infraestructura del patio escolar, sino con su gestión. ¡¡¡ Entre todos podemos hacer unos patios escolares mejores!!


I hope you like it !!

Comentarios

Entradas populares de este blog

Formas geométricas manipulativas

MÉTODOS DE INVESTIGACIÓN CUANTITATIVA